Aconsejamos que al contar la historia bíblica no utilice la narración sino que use el diálogo, cambiando los tipos de voz. Esto hace que la historia sea mucho más atractiva. Por ejemplo en vez de narrar: "Goliat le decía a David que acaso era un perro para que saliera a él con piedras." Describir a Goliat con su potente voz que decía: -Soy yo acaso un perro para que vengas a mí con piedras.
a). Imagine lo más probable.
b). El marco de la lección es el límite.
c). Use su rostro.
d). Use su voz:
Trabajo: Ejercitar el uso de el arte dramático con el pasaje de Mateo 18:23-35